Sala de Prensa

Coordinador General de AECID El Salvador, Ignacio Nicolau:

Tengo el honor de inaugurar esta columna o sección de opinión del Consejo Nacional de Sustentabilidad Ambiental y Vulnerabilidad (CONASAV). Sin embargo, considero que, antes de emitir ningún tipo de opinión, es importante conocer a fondo los antecedentes del CONASAV, su funcionamiento y expectativas, fomentando así a otros colegas a que tomen el relevo y se animen a dar vida a esta sección.

Los consejos nacionales de diálogo surgen por iniciativa del gobierno salvadoreño para dar respuesta a problemas de sectores estratégicos nacionales, y concretamente a los sectores de seguridad, educación y medioambiente. La estrategia elegida en los tres consejos responde a establecer un proceso de diálogo abierto, plural y participativo con todos los agentes sociales relevantes del sector, con el objeto de alcanzar acuerdos país, a través del diálogo permanente. Los consejos de seguridad y educación, los primeros en formarse, y ya cuentan con sus planes sectoriales que recogen las acciones diseñadas para cumplir con los objetivos de país acordados en dicho proceso de diálogo.

El CONASAV reúne, como los otros dos consejos, al gobierno, la sociedad civil, los partidos políticos, las iglesias, la academia, los medios de comunicación, la comunidad internacional y a personalidades destacadas del sector. Se creó por Decreto Presidencial suscrito el 3 de febrero 2016 por el Presidente de la República y la Ministra de Medio Ambiente y Recursos Naturales Lina Pohl.

El diálogo se articula en reuniones plenarias y en mesas técnicas de trabajo donde se desarrollan en profundidad problemáticas subsectoriales. El trabajo de las mesas y de la plenaria es acompañado por la secretaría ejecutiva del CONASAV, que recae en la Secretaría de Gobernabilidad; y por la Secretaría Técnica conformada por la Secretaria de Vulnerabilidad (SAV), el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), la secretaría Técnica y de planificación de la Presidencia (SETEPLAN), el PNUD, la UE, la OEA y la AECID.

El CONASAV está finalizando la elaboración del “Plan El Salvador Sustentable”, basado en todos los insumos que brindaron 8 mesas sectoriales que se establecieron para ello (Cambio Climático, restauración y reforestación, educación ambiental, economía verde, gestión de riesgos, seguridad hídrica, ordenamiento ambiental, y saneamiento ambiental). Tras un concienzudo trabajo tanto de consolidación y priorización, y su posterior validación en sesión Plenaria, el Plan El Salvador Sustentable incluirá los acuerdos y metas agrupados en los 4 marcos de análisis: 1) Fortalecimiento de la institucionalidad; 2) Transformación productiva; 3) Gestión de riesgo y cambio climático y 4) Gestión del conocimiento. Todos los acuerdos y metas están siendo contrastadas en consultas técnicas sectoriales tanto para garantizar su factibilidad en un plazo determinado, como para facilitar su cuantificación y costeo.

Avanzar hacia un desarrollo sostenible es responsabilidad de todos nosotros. Cada quien, desde su trinchera, tiene derechos y obligaciones con su entorno, donde el medio ambiente juega un rol esencial.  Con este espíritu se está formulando el Plan El Salvador Sustentable: a través de un ejercicio de concertación nacional que busca implicar a todos los agentes en acciones concretas, aúnando voluntades y esfuerzos en beneficio del país. Aunque se definen acciones concretas (cuantificadas y costeadas), se trata de la agenda ambiental del país, donde la lógica descansa en establecer compromisos de todos los consejeros de acuerdo a sus responsabilidades y posibilidades, para que cada uno de ellos y ellas contribuyan activamente a un El Salvador sustentable, es decir, adaptado al cambio climático, resiliente y preparado para gestionar riesgos; productivo aprovechando sus recursos naturales sin depredarlos, y responsable mitigando la aceleración del cambio climático.

Complementariamente están trabajando dos mesas, con sus planes de trabajo concretos para realizar acciones urgentes que destacan por su pertinencia, su relevancia y su interés ambiental. La primera de ellas es la mesa de restauración que está preparando la Plantatón 2017 que dará inicio el 5 de junio simultáneamente en todo el país, coincidiendo con el día mundial del ambiente. La meta es plantar un millón de árboles movilizando, tanto compromisos para dar mantenimiento a todos los árboles durante al menos 3 años, como a miles de voluntarios y a diferentes apoyos de todos los consejeros del CONASAV y de la ciudadanía en general. Con ello se pretende restaurar los ecosistemas del país, reducir su estrés hídrico y frenar la desertificación que avanza de manera decidida de la mano del Cambio Climático. La segunda mesa es la de recuperación del río Acelhuate, ese Río que pide auxilio a gritos entre la basura y el riesgo construido a su alrededor. Por ello, atendiendo a este llamado, en el mes de octubre se llevará a cabo una acción focal de recuperación de dicho río.

AECID está comprometida con la sostenibilidad ambiental y la reducción de vulnerabilidades. Es un eje esencial de nuestro trabajo, que está orientado a la erradicación de la pobreza y al pleno goce de los derechos humanos. En este sentido, formar parte de la Secretaría Técnica del CONASAV, contribuye a dar coherencia a nuestro quehacer diario.

Finalizo esta reflexión pasando el relevo: abriendo el espacio de opinión a todas y todos los consejeros a quienes ánimo para que participen en esta columna, expresando sus planteamientos, reflexiones, análisis, consejos o cualquier otro tipo de opinión de interés relacionada con el CONASAV.