Los primeros pasos de la cooperación armonizada en torno a Comunidades Solidarias
La Unión Europea, España y Luxemburgo han realizado ya el primer desembolso -22 millones de dólares- al Gobierno de El Salvador en el marco de su apoyo programático conjunto al principal programa de reducción de la pobreza, Comunidades Solidarias, un “hito histórico” en materia de gestión de cooperación entre el país y sus socios de cooperación, según destacó el embajador de España en El Salvador, Enrique Ojeda.
El canciller de la República, Hugo Martínez, resaltó la “confianza” que los países han puesto en El Salvador, a la hora de poner en marcha instrumentos que harán más eficiente la cooperación que se realiza en el país.
El Programa Comunidades Solidarias, que cofinancian los tres socios mencionados, es el programa insignia del Sistema de Protección Social Universal del Gobierno de El Salvador y se enmarca actualmente dentro del Plan Quinquenal de Desarrollo 2010-2014, impulsado por el Gobierno salvadoreño. El programa, que concentra y focaliza gran parte del gasto social público, abarca dos dimensiones, la urbana y la rural, y su prioridad es la reducción de la pobreza y la exclusión social. Además, cuenta con un importante apoyo de otros socios de cooperación como el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), además de contar con elapoyo técnico de GIZ y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Código de conducta
Los esfuerzos de armonización entre donantes se iniciaron con la firma del Código de Conducta que El Salvador firmó con la Unión Europea, la Agenncia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y Luxemburgo, lo que está permitiendo hacer más eficiente el aprovechamiento de los recursos de la cooperación internacional, al evitar la duplicación de esfuerzos y permitir el seguimiento conjunto.
A través del apoyo programático, los recursos financieros de los tres donantes se transfieren a una subcuenta del Ministerio de Hacienda, denominada Fondo Común de Apoyo Programático (FOCAP). De este modo, estos recursos serán utilizados de acuerdo al sistema público de gestión financiera salvadoreño.
En virtud del apoyo programático, la ayuda de los socios para el desarrollo no se liga a unas intervenciones concretas, sino que comprende el programa completo y las instituciones ejecutoras no rinden cuentas por cada intervención sino por la consecución de unas metas acordadas con los socios. Por ello, el seguimiento y evaluación del programa que realiza el gobierno y los socios se realizará con base en una matriz de indicadores de esas metas.
Para los desembolsos al programa, El Salvador deberá cumplir con una serie de condiciones generales como la sostenibilidad macroeconómica, y otras específicas relativas a los indicadores de las metas del programa.
Cooperación española
De los 22 millones de dólares desembolsados, la UE ha aportado 14.3 millones, la AECID 5.2 millones y Luxemburgo 2.6 millones. La AECID comenzó en 2006 con un apoyo presupuestario sectorial a la política de lucha contra la pobreza en el país, entonces denominada Red Solidaria. Para el periodo 2006-2010, la AECID otorgó al programa una financiación de unos 33 millones de dólares. Para el periodo 2011-2014, los compromisos de financiación de la cooperación española ascienden a unos 20 millones de dólares.